Unas veces por trabajo y otras por amistad, pero supongo que todos los que nos hemos dedicado a esto nos ha tocado hacer en algún momento un trabajo ajeno a nuestro interés personal. Como a muchos, me incomoda en general cuando llegan personas ajenas con ideas para futuros proyectos o cambios en mi obra, pero paradójicamente me emociona trabajar bajo encargo.
Recién me invitaron a colaborar en una revista como ilustrador y el proceso ha resultado por ahora muy simple: ellos me mandan los temas o los artículos y yo hago algo relacionado, con plena libertad creativa. Inclusive cuando no me gustan las ideas del texto, me permito experimentar con lo visual para reflejar un concepto que me satisfaga.
Quizás sea porque me evitan pensar en el tema y me dejan jugar con la técnica, pero resulta particularmente relajante trabajar de esta manera. Claro que nunca he tenido una fecha de entrega apremiante o un proyecto más ambicioso de lo que puedo ofrecer, pero de momento me estoy diviertiendo con las asignaciones.
Estás fueron mis primeras tareas. Además de la petición de unos amigos para una cafetería que están por abrir:
Jack Kerouac - On the road
Katy Perry - Pop idols
Wong Kar Wai
Gato Azul
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